miércoles, 31 de diciembre de 2008

Resumiendo 2008 en Imágenes

Miércoles 31 de Diciembre, 2008.-

Un año más nos está dejando, y con su partida nos quedan los recuerdos de las vivencias, las aventuras vividas y la experiencia que ganamos en el tránsito de esta ruta llena de verde, azul y naranja. Deseando que el año que está a la vuelta de la esquina sea mejor, mucho mejor que el presente, dejo una muestra de las mejores imágenes de este su espacio publicadas a lo largo de 2008, fotos que han de quedar para la posteridad como mis editor's choice para el presente año y que con placer y alegría comparto con ustedes. Quiero aprovechar la oportunidad para agradecer a mis compañeros de viaje y aventura: Verónica, Irene, Aleida, Gabriela, Isaías, Handler, Crisabel y a mi madre Cristina. Sin ustedes, estas fotografías no hubieran sido tomadas.

Un feliz y próspero 2009 para todos ustedes mis amigos y amigas. Un abrazo!

La Natura siempre está a la vista, simplemente hay que dejarla que suelte su timidez. Fotografía tomada en Damasco, Tonacatepeque, El Salvador

El Impresionante Volcán Tacaná y el Ruidoso Río Suchiate, Fronteras naturales entre Guatemala y México.

Una típica callejuela silenciosa con casas de cal y canto en la Bella ciudad Colonial de Suchitoto, Cuscatlán, El Salvador

Miles de personas transitan día a día por esta acera, una de las aceras con más historias del mundo. Aeropuerto Internacional Cuscatlán, San Luis Talpa, El Salvador.

Un breve descanso tras el viaje en el Ferry La Luna, Lago de Suchitlán, Chalatenango, El Salvador

Una de las más hermosas imágines que mi cámara captó este año, con dedicatoria especial a mi querida Imaginativa. Playas de La Libertad, El Salvador

La Economía se burló del sistema este año, Esta imagen muestra un cartel que anuncia la llegada del precio de los combustibles en San Salvador a Cinco Dólares.

De regreso a la Ceiba de Guadalupe luego de mucho tiempo. Un ponche, un elote loco, y la mejor compañía que se puede pedir. Gracias Preciosa por compartir conmigo. Basílica de Guadalupe en San Salvador, El Salvador.

Un icono para todos los Santanecos, la antigua Escuela Normal, en fase de reconstrucción. Ciudad de Santa Ana, El Salvador.

Nuestras aventuras nos llevaron por el sendero de la historia, puede observarse la estructura 3 de San Andrés vigilada por el majestuoso Volcán de San Salvador.

Uno de los mejores paseos fue nuestro viaje renovador, en la que visitamos el parque arqueológico Ciudad de Cihuatán. La imagen corresponde al parque de pelota norte.

Durante nuestro viaje por la Ruta Panorámica, el vanidoso Lago de Ilopango no nos permitió observarle y disfrutar del hermoso azul de sus aguas. Porto Pango, San Francisco Chinameca, La Paz, El Salvador.

Este año el Chuchomóvil trascendió las fronteras, visitando la hermosa ciudad de Antigua Guatemala. En la fotografía, tres de los iconos de la ciudad: La catedral, el Volcán de Fuego y el Portal de los Capitanes Generales. Antigua, Guatemala.


sábado, 27 de diciembre de 2008

Antigua: Una ciudad que te enamora

Sábado 27 de Diciembre, 2008.-

Nuestra travesía por Guatemala a bordo del mimado Bólido Canino continuó luego de las vueltas que dimos en el centro histórico; tras terminar nuestras compras volvimos a la calle, buscando la ruta que nos llevase a nuestro verdadero punto de interés en este viaje de ensueño, que sin dudas y sin ver de menos nuestros anteriores viajes, no deja de ser un viaje único y genial. Salimos pues del centro rumbo al occidente, sobre la Roosevelt buscando la ruta que nos llevase a la otrora capital de nuestra hermosa Centroamérica, tras 40 minutos de ascenso y luego del infernal descenso previo al ingreso a la ciudad, llegamos sanos y salvos a la hermosa ciudad Colonial de Santiago de los Caballeros de Guatemala, actualmente conocida como Antigua Guatemala, o como cariñosamente le decimos los aventureros: "Antigua"; que como ya dije, fungió como capital de las provincias de Centroamérica en la época previa a la independencia hasta que, a mediados del año 1773, tras dos grandes terremotos, documentados como Los Terremotos de Santa Marta, los habitantes de la ciudad decidieran mudarse debido a los cíclicos cataclismos cortesía de los inquietos volcanes que rodean la ciudad.

Como este blog hace mucha referencia a la historia, quiero comentar que el fundador de esta ciudad, y conquistador histórico de Guatemala y parte de Centroamérca, Pedro de Alvarado junto a sus hermanos quien sabe que tenían en mente cuando decidieron fundar sus urbes en sitios tan inquietos como el valle donde descansa la Antigua y el valle de las Hamacas, donde se fundó la definitiva capital de El Salvador allá por el año 1528. Antigua, la cual fue fundada en 1524 por el conquistador Pedro de Alvarado, es uno de los iconos inconfundibles de la tierra Chapina, uno de sus atractivos turísticos más visitados y un referente histórico para el que busca conocer sobre la historia de las Indias de primera mano. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979, Antigua Guatemala goza de una fama única en el mundo por su arquitectura Barroca única en las Américas, de un exquisito detalle y un excesivo derroche de lujo, típico del Barroco, es una ciudad que invita al visitante a explorarla, a caminar sus calles empedradas y a oler el aroma del referente histórico que florece en sus esquinas, en sus iglesias y en las ruinas de hermosas construcciones, recuerdos mudos del pasado reciente de la ciudad.

Este post no es para entrar en detalle sobre cada rincón de esta ciudad, no señor. Es un pequeño homenaje a esta ciudad mágica, a la que no debes ir solo, de preferencia visítala con alguien que puedas tomar de la mano, porque es una ciudad que sin uno desearlo enamora y dan ganas de enamorarse allí, así como sale uno enamorado cuando la deja. Antigua con sus balcones, sus puertas de madera centenaria y sus múltiples iconos, como la Iglesia de San Pedro, es una de esas ciudades que debes visitar antes de morir, una experiencia revitalizadora, que nada más te pide que la respetes, valores y cuides, porque es única.

Visitar Antigua es una experiencia que mezcla la tradición, la historia, el romanticismo y la exploración, todo esto en total armonía con la modernidad, todo en una simbiosis que te invita a recorrer la ciudad a pie (sabia recomendación) y luego de un excitante tour, tomarte unos minutos para degustar un café frente a la Catedral, o comerte un Big Mac mientras lees tu correo electrónico en el singular McDonalds de la ciudad. Por cierto, la mejor época para disfrutar la algarabía de esta ciudad tradicionalmente católica, es durante la Semana Mayor, por la belleza de sus procesiones, su entrega a los actos litúrgicos y claro, la belleza de la ciudad que se pone más linda que de costumbre.

Antigua es contraste y sabor; es color, es detalle, y obviamente la mejor hora para disfrutarla es durante el ocaso y las primeras horas de la noche. Si vas con tu pareja (Muy recomendable), es una experiencia única, el caminar por sus calles con los últimos rayos del sol y observar como estos matizan con la cal y canto de las construcciones, es una de las razones que hacen que muchas parejas decidan pasar su luna de miel en esta ciudad, que no niego admirar y adorar porque parte de mi corazón se queda allá, pues vivo enamorado de ella, por su riqueza histórica, por su recargada arquitectura, por su clima y por las mil y una experiencias que tengo en mi record como visitante de esta elipsante ciudad.

Este post, que espero los enamore a ustedes también, es un homenaje a quienes se tomaron la molestia en fundarla, embellecerla y volverla un verdadero referente histórico. Además, con especial agradecimiento a mi querida Handler, mi guía oficial de la Antigua, quien me hizo enamorar como loco de esta ciudad, ya que gracias a su investigación, a su amor compartido por la historia y a su espíritu vagabundo me incita a volver, porque hay tanto que ver, hacer y disfrutar en esta ciudad, que una sola visita no es suficiente para conocerla, pero sí, para enamorarse de ella.

Tampoco puedo dejar este post sin agradecer a mi madre y a mi hermana Gabi por compartir el ocaso, la magia, el café y la caminata, y todo lo vivido en esta visita a la Ciudad de Santiago de los Caballeros de Guatemala.

Dejo una muestra fotográfica de la Antigua al atardecer con algunos de sus más emblemáticos iconos y otras delicias para su deleite.

Las hermosas facetas de la Catedral Metropólitana de la Antigua Guatemala. Adornada por el sol al atardecer, tras las últimas luces del día y la hermosa iluminación nocturna que le da ese toque magistral a sus contornos.

La sólida belleza del Portal de los Capitanes, y el detalle de su arquitectura colonial, este es uno de los edificios más hermosos no religiosos de la ciudad. En la actualidad el edificio alberga las oficinas de la Municipalidad de la ciudad Antigüeña.

La mejor hora del día para deleitarse con las bellezas de esta histórica ciudad es durante el ocaso. Pueden observarse detalles en las construcciones que sólo con las luces del rojizo atardecer se pueden apreciar.

Esta imagen corresponde a la hermosa fuente del parque central de La Antigua, la cual fue construida en los años 1737-38 por el arquitecto Mayor de la ciudad Diego de Porres. Innegable testigo de la historia de esta ciudad.

Dos de los íconos de la Antigua: El Arco de Santa Catalina y el Volcán de Fuego. El arco, construido en el siglo XVII, es una de las estructuras más fotografiadas diariamente por los turistas.

Esta secuencia de imágenes muestra la belleza del Arco de Santa Catalina, durante el ocaso y en los primeros minutos de la noche; así como una curiosa vista de el lado que personalmente considero menos captado en imágenes.

Una de las fachadas más representativas del arte barroco colonial, es la de la Iglesia de La Merced, Puede observarse la recarga tipica de esta corriente artística en sus múltiples detalles.

Dejo una hermosa vista del parque central adornado con luces por motivo de las festividades Navideñas. Al fondo, la Fuente de las Sirenas.

Un vistazo al Centro Histórico de Guatemala

Sábado 27 de Diciembre, 2008.-

Nuestro segundo día en la ciudad de Guatemala fue un día dedicado a varias actividades interesantes. Por la mañana, luego que llegara mi madre con mi tío Francisco, y también en compañía de mi hermana Gabi, quien se encuentra en esta ciudad desde la navidad, emprendimos un pequeño recorrido por el centro de la ciudad de Guatemala, obviamente guiados con mi guía preferida en estas tierras, mi querida Handler, quien agradezco como siempre la molestia de atendernos tan bien y tomarse la molestia de mostrarnos los rincones más bellos de su ciudad. Siempre que he visitado Guatemala, me he regresado muy contento y sorprendido por lo que esta urbe y esta tierra en general tiene para el visitante, en lo que a historia, arquitectura y gastronomía se refiere. Así pues, abordamos al mimado Bólido Canino con rumbo al centro de la ciudad, específicamente al parque central y el mercado de artesanías, ya que teníamos una misión por cumplir y que en lo personal deseaba concretar por varias razones.

Tras dar un par de vueltas por las calles y avenidas de la zona 1 de la capital Chapina, nos estacionamos en el parqueo subterráneo que existe debajo de la plaza central, un lugar que ha cambiado mucho desde mi última visita, en el cual se han remosado algunos edificios históricos como el portal y se ha embellecido con una duela de piedras las aceras circunvecinas del parque, dejando para el acceso exclusivo de peatones la cuadra que circunda al parque central, el Palacio Nacional, la catedral y los portales. Una cuadra al oriente del parque central, se encuentra el mercado de artesanías de la ciudad, un lugar lleno de micadas -como dicen por allá- hechas por las manos artesanas de los Guatemaltecos. Aquí como en mi tierra, se pueden encontrar hermosas piezas llenas de tradición, que expresan el amor que esta gente le tiene a su tierra. Aquí, con un par de Quetzales, se pueden obtener curiosos recuerdos en barro, madera, tela, cuero, y demás, en una sinfónía polícroma llena de aromas interesantes y detalles tan diversos como lo es esta tierra multicultural. Nuestra meta en este lugar era encontrar una toalla que me había solicitado mi querida tía Cristina quien vive en Canadá desde hace muchos años y se identifica con Guatemala tanto por sus raíces maternas como la herencia que sus hijos tienen debido a la mezcla que sigue a mi familia desde siempre: uniones entre personas de las dos nacionalidades. Así pues, recorrimos el mercado de arriba abajo, buscando una toalla con motivos alegóricos a la tierra del Quetzal, pero como mi tía irónicamente me había pedido, "quisiera me consiguiera una toalla con motivos Chapines, pero de marca Hilasal" Digo ironía porque la toalla Hilasal, es Salvadoreña por excelencia, una de las mejores en el mundo y que he visto en los hoteles más lujosos en los que me he hospedado. ¿Pero con estampados de motivos Chapines? Al principio lo consideré una locura, pero me dije, nada pierdo con buscarle su toalla a mi tía y por que no, es mi tía Tipería y ella se desvive por complacer a su sobrino querido... así pues, como decimos aquí en El Salvador, por pura guasa, buscando una cosa hallamos otra, y mientras mi madre buscaba una blusita para mi sobrina Mariel, encontramos la dichosa toalla Hilasal con motivos Chapines. Otro de los artículos que buscaba en dicho lugar, era el mérito que le daría a mi carrito por trascender las fronteras, y tras buscar y preguntar, por fin encontré lo que buscaba para mi querido Canino Metálico: Una banderita de Guatemala similar a la que orgullosamente porta de la patria que ha recorrido durante dos años y medio conmigo al volante, un memento que le da el estatus de aventurero internacional tanto a mi querido carrito como a este blog.

Tras terminar nuestras compras y terminar de recorrer el mercado, volvimos a la calle para deleitar la vista con la magestuosa fachada de la Catedral Metropólitana, el Palacio Nacional y los portales, bellas estructuras llenas de historia, que cuentan la historia reciente de la Nueva Guatemala de la Asunción, ciudad pujante que nació luego que los habitantes de la Antigua capital de la República se hartaran de los cíclicos cataclismos que ocurrían en la zona, gracias a la acción de los inquietos volcanes que circundan la ciudad vieja. Pero dejaré que la historia me permita otra visita a esta gran urbe y así poder explorar con más detalle cada uno de los edificios más representativos de esta ciudad llena de contrastes y una belleza única en Centroamérica.

Esta nota quiero dedicarla con mucho cariño a tres mujeres singulares, únicas y a quienes agradezco por todo el cariño que le tienen a este servidor, mis tías Ana y Cristina y claro, a mi guía particular en Guatemala, quien siempre me deja maravillado con sus apuntes de viaje, mi querida Handler.


Dejo una muestra fotográfica del ground zero de la ciudad de Guatemala para su deleite e invito a continuar nuestro recorrido por Guatemala, visitando la ciudad de Antigua al atardecer.

Catedral Metropolitana como siempre impecable y hermosa con su estilo Renacimiento Colonial. Construida a fines del siglo XVIII, luce grandiosa e imponente. Fue remozada luego de los terremotos de 1917 y 1918 que la dañaron considerablemente. En la imagen inferior que tomé respetuosamente del libro "Centro Histórico de la Ciudad de Guatemala" (ISBN 84-89452-60-1), del renombrado periodista Guatemalteco, Don Héctor Gaitán, de mi personal admiración, puede observarse el proceso de reconstrucción de esta bella estructura.
La belleza del Palacio Nacional con su fachada imponente y su verde turquesa digno de admiración. En la entrada principal del palacio existe una placa que demarca el punto cero de la cuidad, desde donde parten las distancias carreteras del país del Quetzal.

Siguiendo con la tradición, les dejo una imagen de una de mis artesanías favoritas, los monococos, en su versión Chapina, un poco diferente a la Salvadoreña.

La artesanía Guatemalteca goza de renombre internacional gracias a su diversidad y a su calidad. Pueden notarse los detalles en la pintura hecha en huevos y en pequeñas artesanías como esta simpática piedra de moler con el lago de Atitlán como paisaje.

He aquí la toalla irónica. Mi querida Handler y mi hermana Gabi posando para la cámara mientras muestran la toalla Hilasal con motios Chapines.

Guatemala goza de una riqueza cultural incomparable, en la imagen, muñecas vestidas con los trajes típicos de las diferentes regiones del país. Cada región tiene sus texturas y colores únicos y sus trajes son igual de hermosos.

Santos para todos los gustos tallados en madera. Artesanías provenientes del Altiplano Chapín, una de las regiones más bellas de esta tierra.

viernes, 26 de diciembre de 2008

A Guatemala por la Panamericana

Viernes 26 de Diciembre, 2008.-

Desde que mi querido Bólido Canino y yo recorremos juntos los caminos de la vida, me había propuesto algún día trascender las fronteras de mi tierra chiquita y linda, rodar el asfalto de las tierras Centroamericanas y vivir de primera mano los sabores, texturas y colores de estas tierras bellas de las cuales vivo encariñado por haberme recibido alguna vez y claro, por la diversidad histórica, la infinidad de paisajes, y la genialidad de su gente. Este fin de semana el Chuchomóvil nos llevó por la Panamericana hasta la Tierra de la Eterna Primavera, en un viaje de ensueño, en una aventura fuera de serie, en la que mi madre y yo despedimos el año y nos tomamos un momento para disfrutar de la carretera, del paisaje y de la belleza que Guatemala tiene entre su inventario de virtudes. Orgullosamente presento nuestro primer viaje internacional a bordo del Chucho, una travesía que cumple con las exigencias de todo viajante, y que dejó un mérito para mi adorado compañero por llevarnos y traernos con el comfort y seguridad de costumbre. Esta entrega pionera incluirá una visita al Centro Histórico de la Capital Chapina y claro, un viaje necesario y de cajón a la capital Colonial de Centroamérica, La Antigua Guatemala, también llamada Santiago de Los Caballeros de Guatemala.

Nuestro viaje, como de costumbre precisó de cierto nivel de planificación, el cual había venido organizando desde finales de noviembre, ya que para un viaje de esta envergadura, era necesario someter al Cánido a una revisión general y claro solicitar en mi trabajo una licencia para poder viajar con más tiempo y poder hacer todo lo que mi lista de actividades contenía. Así pues, luego de la fiesta navideña, emprendimos el viaje a través de la Panamericana, llevando un montón de regalos para los parientes; las pupusas, que son un producto muy degustado por aquellas tierras, fueron provistas por la madre de mi querida Irene, que por cierto se ganaron las fanfarrias y elogios de parte de mis familiares, ya que comercial aparte, son muy buenas y según me explicó mi amiga, fueron hechas con dedicatoria especial para este servidor. Además llevábamos un cargamento de alfajores, un bocado delicioso que también es muy bien recibido en aquellas tierras y también previo a nuestra salida de la ciudad, pasamos a comprarle su dotación de rigor de Panes con pavo al Papa Nato, patriarca de mi familia en Guatemala.

Nuestro viaje por la carretera puede ser dividido en dos partes, obviamente la parte Salvadoreña fue muy cómoda, debido al buen estado de la autopista San Salvador-Santa Ana y luego la ruta Santa Ana-Ahuachapán, las cuales permiten una conducción rápida y segura. Tras unos 90 minutos de viaje hicimos nuestra parada migratoria en el punto fronterizo Las Chinamas/Valle Nuevo, donde nos registramos como viajantes dentro del sistema CA-4, el cual permite el libre tránsito de personas, mercaderías y vehículos entre Guatemala, Honduras, Nicaragua y El Salvador. Para el viajante en vehículo hago el comentario que para movilizarse dentro del sistema no es necesario hacer ningún tipo de trámite para circular, solamente llevar la tarjeta de circulación y la licencia por si la policía les detiene en ruta para efectuar alguna inspección de rutina. Tras el papeleo migratorio y un breve descanso, emprendimos el viaje en el tramo Chapín, el cual desde el punto fronterizo hasta la ciudad de Barberena se encuentra un poco deteriorado, pero igual, ofrece una conducción llena de paisajes a medida que la Panamericana va ascendiendo hasta llegar a su punto más alto del recorrido en la zona de San José Pinula. Un comentario muy necesario para el viajero es que los últimos 50 kilómetros de carretera, precisamente partiendo de la ciudad de Barberena han sido actualizados con una moderna autopista de cuatro carriles, que compensan el viaje ajetreado desde la frontera.

La noche previa al viaje, había conversado con mi querida Handler, sobre el dilema del ingreso a la Ciudad de Guatemala de La Asunción, pues aunque he ido infinidad de veces a la capital, era mi primera experiencia personal al volante. Pero con un par de referencias pude sortear las calles y avenidas de la ciudad desde que llegamos al famoso Obelisco de la zona 9, hasta llegar al domicilio de mi familia en el corazón de la ciudad, en el centro histórico de la misma.

Tras nuestro arribo a la casa de nuestros parientes, y la respectiva entrega de los presentes que llevábamos, pedí a mi querida Handler que me acompañara donde su mecánico de confianza para que fueran revisados los frenos del Chuchomóvil, ya que para el día sábado nos esperaba una ruta que necesita buenos frenos. Así pues, el Cánido mimado fue revisado de sus frenos para mantener el estándar de seguridad requerido por la ruta que emprenderemos y que podrá ser deleitada en mi siguiente post. Tras retornar del mecánico y recorrer algunas calles del centro histórico de la capital Chapina, regresamos al domicilio para recoger a mi madre e ir a dar un breve paseo por la ciudad, para saciar uno de los caprichos de este servidor, y que deseaba compartir con mi madre, y que claro, deseaba volver a degustar luego de casi dos años de no visitar Guatemala por diferentes motivos. Así pues, seguimos quemando gasolina saliendo del centro, tomando el periférico, pasando por el emblemático Puente del Incienso hasta encontrarnos con la Roosevelt, vía que te saca de la ciudad hacia el occidente del país, pasando por Mixco y llegando hasta la fresca ciudad de San Lucas, luego de ascender por la vía que sortea el cerro Alux, en una nueva prueba de trabajo para mi carrito. En San Lucas, recomiendo a los amantes del café, detenerse un par de minutos en la Texaco que está en el trayecto previo al desvío hacia la Antigua. Aquí preparan uno de los cafés temáticos más deliciosos del universo, el delicioso café tres leches, un café que como su nombre lo indica, está basicamente prepardo con uno de los mejores cafés Guatemaltecos, al cual se le añade leche entera, y un delicioso topping de crema chantillí y leche condensada. He de añadir para mejorar la experiencia del viajante, que este postre está hecho de uno de los cafés más deliciosos de la región y los productos lácteos son preparados "in situ" lo cual se puede comprobar con el delicioso sabor de la crema Chantillí con que es preparada esta celestial bebida.

Tras llenarnos la sangre de cafeína y lactosa, y claro, tras darle de cenar al Chuchomóvil una ración de Gasolina Chapina, decidimos el retorno a la ciudad sin antes hacer una parada obligada y nostálgica en el mirador de la ruta, donde degustamos del frío clima de la zona, probamos algunos platillos típicos Chapines, como el atol de elote, el cual difiere un poco del atol Guanaco, las insuperables tostadas con aguacate y cebolla y mi madre que probó un plato de longaniza con frijoles negros y guacamole, todo con el toque de la cocina Chapina que en lo personal me gusta mucho. Todo esto acompañado por la vista nocturna de la ciudad de Guatemala. Aunque el clima a mi juicio era genial, mi madre titilaba por el frío que hace en esa zona, por lo que me pidió continuaramos el viaje de regreso a la ciudad, sin antes pasar a visitar a mi querido tío Francisco y su familia, con quienes mi madre pasó las noches de nuestra estancia en Guatemala, mientras yo me retiré de nuevo al centro para guardar en lugar seguro al Cánido mimado y descansar en la casa de mi querida Handler, luego del extenuante viaje, el cúmulo de experiencias vividas en un solo día y prepararme para nuestra verdadera aventura, la cual podrán degustar en mi siguiente post, en el que haremos una visita al centro de la ciudad de Guatemala y visitaremos la Romántica ciudad de Antigua Guatemala.